10/2/10

Just trying to kill the pain

Me siento como esas minitas patéticas que pasan sus vidas esperando y llorando por el amor de sus vidas.
Patéticamente sentadas imaginando cuán bello sería que ese hombre de ensueños venga a rescatarlas y sacarlas de su miserable vida, para formar junto a él otra patética vida colmada de mierdas fantasiosas y finales felices.
El tema está que cuando una no cree en esas cosas, solo espera que un hombre te haga reir, que sea sincero y que te quiera. Básicamente eso. Lo demás no importa.
Pero dentro de esta película también aparecen esos extraños personajes que lo único que hacen es arruinar lo único que en este momento es importante para vos en tu vida. La única cosa que te hace sonreir todas las mañanas después de haber pasado 16 años intentando salir de las cadenas del pasado. Lo único que estaba segura que controlaba, que solo dependía de mi y de alguien más, pasa a un plano terero y la atención se centra en... la culpa, la debés tener vos.

No. No la tengo yo. Eso me hacen creer, eso quieren creer los demás, cegados por eso mismo que llaman orgullo. Dementes que intentan controlarte la vida como si fuéramos marionetas y no tengamos en claro las cosas que queremos para nosotros mismos.

No hay comentarios: