Juan Cruz, el nuevo cómico

Y ustedes ya no lo pueden creer, mi tío es un personaje de aquellos. Como ya habíamos visto en el capítulo anterior, de "excursión vegetal", el tipo no se pod´´ia quedar quieto es un tractr de putas. Ahí les va.
En casa, tranquilos almorzando, entra el hombre en cuestión y se sienta a laburar e su computadora portátil (eaa).

Empezaron una conversación sin mucho sentido para mi, entre mi madre y él, hablando de un par de clientes que llamaban a los cuales ella no tenía ganas de atender y estaría bueno no decirles nada, no atender más el teléfno, ni dar señales de vida, para que, simplemente, no rompan más los kinotos.

Sin preámbulos ni aviso previo, el cómico de esta saga recita.

- Le voy a decir que es para Stambualanganga-

-JAJAJAJAJAJA- ustedes no se dan una idea de lo que me reí, estaba en mitad de la preparación de mi perfecta leche con chocolate y el tipo vino a interrumpir su cocción.

-Te imaginás que haga eso- (y acá ya sabe que tiene toda nuestra atención puesta en él asi que no hace más que seguir haciendonos doler el abdomen) - el hombre no entendería nada, o sinó podríamos decirle, si mirá e hacemos una campana vancalgangalga-

-JAJAJAJAJAJAJAJA- No podés ser tan hijo de puta!.

-JAJAJA, como el personaje de Capusotto- le digo.

-Jajaja, si como es que se llamaba?- me preguntó.

-Nicollino Roche y Los Pasteleros Verdes- entre risas le dije.

-Jeje, u otra sería decirle, y mirá puede estar para el Jueves de Auncanpalangalga. No puede ser siempre me sale la misma palabra, tengo que cambiar- No puede parar de hacer bromas ahora- Me salen todas anganga- con un tono de voz bien, pero bien gangoso.

-Jajajajajajjajajaj- mi vieja ya se descostillaba de la risa, y yo no pude dar un sorbo a mi taza de leche.

-VANCALEPNA!!- dijo con todo el esfuerzo, que retorció la cara de una forma en la que ni un mino podría evitar reirse.

Y para o acabar con la sesión de risa y endorfina empezó con una anécdota...

-Un día estabamos sentados en una mesita de un bar afuera con Leandro, y viene un nene que repartía tarjetitas con los signos del zodíaco. Nos pregunta de cuál érmaos, Lea le dice de escorpio, y yo le digo... Olimpo. Y el pibito revolvia de acá para allá, me mira y me dice "de ese no tengo"-

-jajajaja que hijo de dios.-

-Jajajaj, no sabés la cara que me puso, dame una de cada una le dije yo- bueno al menos se apiadó del pobre chico.

A rato le dice a mi vieja, -Te acordás cuando mandaba a Pablo a la farmacia a que me traiga "savia de estambul"? Y volvía al rato y me decía "que me hiciste decir hijodeput*".-

-Jajajjaa, que sorete que eras!-

Y así concluye esta osada tarde con el hombre rama (?).